La muerte es un tema del que no nos gusta hablar. Pero si eres de esas personas para las que es importante la manera en la que te vas a despedir de los tuyos, deberías de hacerlo, al menos para dejar todo en orden y bien preparado. Los testamentos en los que se especifica la forma en la que se desea que se realice el funeral e incluso se destina un dinero para ello, son frecuentes.
En estos casos, la persona deja un fondo destinado a su funeral, por ejemplo, para que puedan acudir familiares que están lejos o para que se le pueda encargar una lápida con unas características concretas. En el momento en el que fallece, la persona que haya designado para ese fin se encargará de que todo se lleve a cabo según sus deseos.
Cada vez más personas quieren que su funeral sea un acto social en el que su familia tenga la oportunidad de despedirse de él o de ella de una manera especial. Por eso, han surgido en España empresas que organizan funerales y a las que puede acudir la persona en vida para dejar contratado el futuro evento o pueden acudir familiares para organizar algo especial por su ser querido.
Lo primero que se debe de pensar es si se desea ser enterrado o incinerado. Hoy, incluso los seguros decesos baratos cubren la incineración y los gastos básicos que conlleva. Pero si quieres ser enterrado o quieres que haya más flores de lo habitual, tal vez debas de contratar extras que te van a suponer un incremento en la cuota. Eso sí, al menos podrás saber que tendrás eso que quieres y si eres de los que tienen una póliza de decesos desde la infancia, seguramente el incremento sea mínimo.
Algunas personas dejan instrucciones de cómo quieren que sea su funeral, pero no lo hacen ante notario. En este caso, no van a ser de obligado cumplimiento y nada, más allá del cariño y respeto de la familia, garantiza que se realicen las cosas como se deja estipulado. En cualquier caso, siempre es de agradecer que se dejen instrucciones sencillas y no se pida a la familia que hagan algo que puede resultar complicado de cumplir ya sea por su alto precio ya sea porque es ilegal. Esto último es frecuente cuando se pide que las cenizas se esparzan en lugares en los que no está permitido hacerlo.