Existen muchos juguetes educativos para niños pero los primeros de todos son aquellos que están pensados para estimular sus sentidos. Cuando el niño toma conciencia de sí mismo comienza a explorar su cuerpo y el mundo que le rodea. En esta etapa su avidez por descubrir nuevas cosas es satisfecha con los juguetes, que le ayudan a conocer cosas de su entorno.
Entre los juguetes para niños que más destacan están los juguetes musicales. Todo aquello que emita sonido le llama la atención al pequeño desde el momento del nacimiento y por eso sus primeros juguetes suelen ser peluches suaves que dicen algunas palabras o que emiten melodías. Estos últimos suelen acompañar al niño en sus sueños y les relajan.
Los juguetes musicales, además de estimular el oído del niño, a menudo también estimulan su vista con algunas luces o con colores llamativos. El niño aprende así a distinguir los colores y también a apreciar los matices de las melodías.
Los gimnasios de actividades son perfectos para que los niños exploren sus posibilidades y disfruten descubriendo todo tipo de sonidos y juegos. Solos o acompañados de sus padres, los bebés aprenden a agarrarse de las asas, a tirar de las cintas o a dar pataditas a sitios específicos de los que saldrá un sonido.
Cuando crezcan un poco más podrán comenzar a distinguir, además de sonidos y colores, algunas formas. Es el momento en el que disfrutan con regalos como los famosos cubos con agujeros con diferentes formas en los que deben de encajar piezas para poder meterlas en el interior. A la mayoría de los niños les fascina ir descubriendo la correspondencia entre la forma que tienen en las manos y el agujero por el que entrará de modo perfecto.
Los libros no son solo para niños que ya saben leer, hay libros pensados para los más pequeñitos en los que se puede disfrutar de una historia mediante dibujos, texturas e incluso descubriendo olores al frotar en determinadas áreas del papel. Un ejemplo, si el niño frota sobre una naranja, le olerá a esta fruta asociando la imagen a un olor.
Todos estos juguetes tan divertidos ayudarán al bebé a ir reconociendo diferentes cosas del mundo que le rodea y a crecer. Su curiosidad jamás se ve satisfecha y es misión de los padres ir presentándoles nuevos retos para resolver según van creciendo.