Muchas mujeres quieren contar con un seguro de salud privado en el momento del embarazo, como el adeslas seguro medico, ya que les ofrecen múltiples ventajas. Pueden acudir a más revisiones ginecológicas y hacerse un mayor número de ecografías. Incluso, en algunos casos, tienen a su alcance la oportunidad de ecografías realistas que les permiten ver la cara de su bebé.
También pueden elegir hospital en el momento del parto y disfrutar de una habitación privada para estar a solas con su hijo y su pareja y las personas que escoja. Esto hace que todo el proceso sea mucho más íntimo y agradable sin tener que pasarlo rodeadas de extraños.
Pero para poder disfrutar de estas ventajas hay que contratar el seguro antes de quedarse embarazada, ya que todos cuentan con un periodo de carencia, es decir, un tiempo durante el cual no está incluido este proceso. Pero esto no es nada negativo, al contrario, ya que contratando el seguro con antelación la mujer puede acudir al ginecólogo para que este le revise, se cerciore de que todo está correcto para intentar el embarazo e incluso le recomiende vitaminas o refuerzos que debe de tomar para que todo esté listo en el momento de alojar una nueva vida.
Al contratar el seguro de salud, lo normal es incluir también al niño cuando nazca, por lo que dispondrá de todas las ventajas a lo largo de su crecimiento. Porque este tipo de seguros no solo son aconsejables cuando se quiere tener descendencia, sino que son ideales para toda la familia en todo momento. Gracias a ellos, se tiene acceso a los especialistas de manera muy rápida y sin esperas y también a todas las pruebas necesarias para diagnosticar.
El precio de los seguros varía en función de las coberturas y también de los copagos. Los más caros son los que no tienen copago alguno, pero hoy en día son los menos frecuentes. Normalmente, se contrata un seguro con un copago que puede ser alto en el caso de personas que utilizan poco el seguro de salud, de modo que las cuotas mensuales sean reducidas. O puede ser bajo si se van a utilizar más los servicios, en cuyo caso las cuotas son ligeramente más altas pero se paga menos cada vez que se acude a la consulta. A mayores, estos productos pueden completarse con un seguro dental.